Este año hemos sumado a nuestra área de Investigación un nuevo proyecto capaz de salvar millones de vidas. Se trata de un laboratorio para la investigación de enfermedades prevalentes en África Central, que desde ahora apoyaremos financiando el salario de uno de sus investigadores y una parte importante del coste de los materiales utilizados en su trabajo científico.
Se trata de una iniciativa de la Fundación Navarra para la Asistencia Médica en África (Fundación NAMA) y su finalidad es desarrollar nuevas lineas de investigación relacionadas con la malaria, la hepatitis B y la drepanocitosis, todas ellas enfermedades altamente endémicas en el continente africano.
Este laboratorio, denominado Afrilab, estará dirigido por el Dr. Jesús Prieto Valtueña y centrará sus esfuerzos en el diseño de nuevos enfoques terapéuticos para estas enfermedades utilizando, entre otros, métodos de transferencia génica aplicables en el contexto africano. También abrirá sus puertas para acoger a científicos africanos, a quienes formará en las técnicas científicas más punteras. Las instalaciones dependerán del Centro de Investigación Médica Aplicada (CIMA) de la Universidad de Navarra, una institución con la que nuestra entidad lleva colaborando más de una década.
Una cura para revivir África
La importancia de la labor que se realizará desde este laboratorio radica en que uno de los factores que frenan el desarrollo de África son las múltiples infecciones endémicas que afectan y amenazan de forma constante a la población. Se investigarán especialmente las infecciones causadas por la malaria -que causa más de medio millón de muertes al año-; el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH), que actualmente afecta a unos 24 millones de personas en África subsahariana; y el virus de la hepatitis B (VHB), que mina la salud de manera silenciosa hasta degenerar en cirrosis y cáncer de hígado.
El Afrilab también abordará la investigación de la drepanocitosis, una enfermedad devastadora causada por una mutación del gen de la hemoglobina, que causa la deformación de los glóbulos rojos, ocluyendo los pequeños vasos sanguíneos, lo que tiene como consecuencia infartos cerebrales, necrosis ósea, infartos intestinales y lesiones en otros órganos, ocasionando la muerte de los afectados a edades tempranas.
Estas cifras son sólo la punta de iceberg de los males que afectan a África, pero ponen de manifiesto la urgencia de potenciar la investigación médica encaminada a controlar estas infecciones. A través de los proyectos de cooperación y salud que mantenemos en Kenia y Malaui, en FMLC hemos tomado conciencia de lo vulnerable que es la población de este continente ante la enfermedad. Por eso, esperamos que a través del Afrilab podamos ayudar a descubrir nuevas modalidades terapéuticas que mejoren la inmunidad frente a la infección y consigan erradicarla en un plazo corto.